Te escribo sin penas, dulce ironía
que alejas de mi toda utopía,
sin necesidad que sirvas de guía
ni dejes un mundo en la deriva
Hoy pude comprender esta vida,
cuál propósito, una dramática espina,
sabiendo una predicción sin certeza
y dejando abrir un camino hacia mi
Los fantasmas no robaron el aire,
ayudaron a encontrar una respuesta
y las críticas sin intención de lastimar
sólo ayudaron a encaminar la mirada
Y si nada sirvió en verdad de guía,
no lo fue en vano, extendieron su mano,
ayudaron a mantener y a quitar espinas
hoy se esta satisfecho con uno mismo
Al ver estas palabras comienza una vida,
denotan alegría, reaniman la lectura
limpiando un turbio pasado con olvido
y reforzando la búsqueda del destino.
9.10.08
Suscribirse a:
Entradas (Atom)